Día 9-5-2015.

Desde Vilei hasta Portomarín – 19 kilómetros.

De nuevo por pista asfaltada progresamos hasta la parroquia de Barbadelo.

Continuamos por una pista asfaltada hasta las aldeas de Rente y Mercado da Serra.

Tomamos un corredor arbolado de frente, pasamos junto a una fuente decorada con la mascota del Xacobeo 93 y un kilómetro después junto a las puertas del Molino de Marzán.

Seguimos a la derecha y atravesamos un pasal de invierno, que evita que metamos el pie en la balsa de agua. Pronto cruzamos la carretera para llegar a Leiman.

Después Peruscallo, con algunos hórreos, donde venden frambuesas y bordones. Dejamos el asfalto y pasamos por Cortiñas y Lavandeira.

Entre muros de piedra y castaños alcanzamos Brea y unos metros más adelante el mojón de los 100 kilómetros. Unos metros más adelante se encuentra Morgade.

A la salida, un cartel nos da la bienvenida al Concello de Paradela y llegamos a Ferreiros.

Bajamos por pista asfaltada hasta Mirallos. Acto seguido se encuentra la iglesia románica de Santa María, que se bajó piedra a piedra desde Ferreiros en 1790.

El Camino se dirige por asfalto desde Mirallos a A Pena.

Posteriormente avanzamos hasta Couto y Rozas. Tomamos una senda en ligera cuesta al abrigo de los robles y pinos. En el primer cruce que se presenta seguimos por la izquierda, hasta que llegamos a Moimentos. En unos minutos llegamos a Mercadoiro.

El itinerario nos conduce a Moutrás, donde hay una tienda de alimentación, bebidas, parafarmacia y artesanía.

Tras una cuesta y pistas asfaltadas descendemos hasta Parrocha y Vilachá.

Un brusco descenso nos acerca hasta el río Miño, embalsado por Belesar. El puente nos acerca hasta Portomarín. La entrada al pueblo se hace por uno de los arcos del viejo puente romano - medieval, reconstruido para asentar una escalinata y colocar una pequeña capilla. Subimos por ella y pasando el Centro Virtual de Información al Peregrino nos dirigimos hasta el centro del pueblo.